viernes, 6 de noviembre de 2009

Esto sí es televisión de la buena...



Esta increible visión ha inspirado a mi romántico yo, el más romántico, el más analmente bonito. Espero que fluya por vuestros corazones, como lo haría un pedo en un tornado.

Ohh gran raja del culo,
que superas la adversidad
y alcanzas la claridad
proveniendo de lo oscuro.

Tú,
gran y en muchos casos peludamente habitada,
depresión que formas lo más íntimo de nuestro cuerpo,
y lo más llamativo del cuerpo de un mono.

Tú,
que eres capaz de provocar placer a los homosexuales
y que tan bien te insinuas en la figura de una fémina.

Tú,
de cuyo final hemana la savia del ser humano,
que te eriges como la columna vertebral del bullate,
que formas la insinuosa separación entre nalgas.

Tú,
simplemente tú.

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